La Empresa Pública de Movilidad del Norte, Movidelnor EP, inició el proceso de fiscalización a las unidades de taxi convencional del cantón Ibarra. Mediante este procedimiento el equipo técnico evalúa el cumplimiento de las normas técnico mecánicas y verifica los documentos habilitantes de las unidades de esta modalidad de transporte público con la finalidad de garantizar un servicio óptimo para la ciudadanía.
Desde el 13 hasta el 20 de noviembre se han fiscalizado 329 unidades y, se pretende que, hasta diciembre 2023, se alcance un total de 987 unidades. En enero de 2024 continuará el proceso hasta revisar las 1033 unidades de las 46 operadoras existentes en el cantón.
Según Fernando Ortiz, jefe de la unidad de fiscalización, la inspección se realiza de acuerdo a una guía de procedimiento que evalúa el estado mecánico de la unidad como: carrocería interna y externa, iluminación, neumáticos, vidrios y otros, y, de igual manera, la vigencia de los títulos habilitantes como revisión técnica y matrícula. Esta evaluación exige que las unidades cumplan con todos los estándares de calidad para brindar un buen servicio a la ciudadanía.
Las unidades que no aprueben este control, según Ortiz, serán notificadas a través de un informe técnico, y tendrán un segundo llamado, plazo en el que se deberá realizar las correcciones respectivas.
El gerente general, Michael Jiménez, aseguró que los funcionarios de Movidelnor EP trabajan de manera conjunta con los transportistas, para mejorar el servicio de transporte público, incrementar la calidad y garantizar la seguridad de los usuarios.
La fiscalización está contemplada en el artículo 92 del Reglamento a la Ley de Tránsito Transporte Terrestre y Seguridad Vial. Movidelnor EP, en cumplimiento a sus atribuciones, mantiene el compromiso de velar por el bienestar ciudadano, a través de un servicio garantizado y así generar una movilidad segura y responsable.
Mauricio Larrea, gerente de transporte de Movidelnor EP, recomendó a la ciudadanía usar siempre el servicio de taxi regulado, es decir las unidades de servicio público de color amarillo. “Esto garantiza seguridad, pues los vehículos y los conductores están identificados y pertenecen a una cooperativa o empresa legalmente constituída”, concluyó.
