El pasado domingo 09 de diciembre de 2023, en la comunidad kichwa de Monserrat, se llevó a cabo un acto de justicia comunitaria en respuesta al hurto de un celular en el terminal terrestre de Otavalo.
La víctima del robo decidió tomar medidas por cuenta propia antes de entregar al presunto ladrón a las autoridades policiales.
Según testigos, el individuo fue sorprendido luego de que se descubriera su intento de robo en el terminal de buses de Otavalo en horas de la mañana.
En lugar de esperar a la intervención policial, la comunidad decidió tomar acciones inmediatas para impartir su propia forma de justicia.
En el proceso de «purificación», como lo describen los habitantes de Monserrat, el presunto ladrón fue sometido a latigazos, aplicación de ortiga y agua fría como una especie de correctivo por su acción delictiva. Este tipo de prácticas, aunque controvertidas y al margen de la ley, son conocidas en algunas comunidades como una forma de mantener el orden y disuadir a posibles delincuentes.
Finalmente, después de recibir este castigo comunitario, el individuo fue entregado a la policía para enfrentar las consecuencias legales de sus acciones. La policía tomó custodia del hombre, quien mostraba signos evidentes de haber sido sometido a la purificación comunitaria.