El cuerpo de Martha Estefanía, de 26 años, fue encontrado sin vida en una quebrada de la provincia de Esmeraldas tras una semana de intensa búsqueda. La joven, quien ofrecía servicios de transporte en un automóvil azul, presentaba signos de violencia, según las autoridades.
El caso se inició el pasado lunes 6 de enero, cuando Martha informó a su padre, Luis, que realizaría un viaje desde Ibarra hacia San Lorenzo, en el norte de Esmeraldas. Según relató la familia, el pasajero era un supuesto militar y cliente frecuente. La última comunicación con la joven fue a las 19:20 del mismo día, cuando todo parecía estar en orden.
La investigación arrancó luego de que el padre de Martha presentara una denuncia por desaparición involuntaria en la Fiscalía de Imbabura el miércoles 8 de enero. Imágenes de cámaras de seguridad mostraron que la joven cargó combustible en una estación de servicio frente a la Terminal Terrestre de Ibarra, acompañada por un pasajero.
Con la ayuda de un localizador GPS, el automóvil de Martha fue encontrado en Mataje, una zona boscosa de la parroquia fronteriza con Colombia. Testigos aseguran haber visto el vehículo en la Y de Calderón, cerca del ingreso a San Lorenzo, antes de que se perdiera todo rastro.
El padre y el hermano de la víctima se trasladaron al lugar para colaborar en la búsqueda, liderada por agentes de la Policía Nacional. La investigación se centra ahora en el paradero del pasajero, quien también está desaparecido.
En el hogar de Martha, ubicado en el sector de Caranqui, Ibarra, el ambiente es de consternación. La familia enfrenta el impacto emocional de la pérdida, especialmente el hijo pequeño de la víctima. Extraoficialmente, se conoció que el paradero del supuesto militar que contrató el servicio de transporte también es desconocido.
Las autoridades continúan las investigaciones para esclarecer las circunstancias del crimen y localizar al pasajero, mientras la comunidad y familiares claman por justicia.
