Caminamos con paso firme para que en Imbabura exista una mejor calidad de vida, en condiciones de igualdad y libre de violencia.
Imbabura. Alrededor de 80 mujeres urbanas y rurales de la provincia de Imbabura fueron parte de la construcción del Warmi Imbabura, un espacio de asesoría, acompañamiento y atención a mujeres y personas en situación de violencia intrafamiliar, y jefas de hogar.
A través de dos grupos focales desarrollados en los cantones de Ibarra y Otavalo se conoció las necesidades, así como los requerimientos que los hombres y mujeres desean que se plasme mediante el Warmi Imbabura; para el trabajo en los grupos se contó con el equipo consultor de la organización Shungo, quienes realizaron una metodología diferente a través de dramatizaciones, mapeos territoriales, grupos de trabajo, entre otras acciones.
Para la institución es importante construir la política pública y los servicios desde la voz de la gente, “estamos escuchando a mujeres urbanas y rurales, mujeres que no tienen acceso a la justicia; para conocer de su viva voz cómo tienen que ser y funcionar estos centros que los van a acoger”, dijo Paolina Vercoutére Quinche, viceprefecta de Imbabura.
En las mesas de trabajo los y las participantes plantearon varias necesidades; por ejemplo, desde el pueblo Karanki se destacó la importancia de que las personas que atienden en las oficinas sean bilingües. Asimismo, expresaron su deseo de contar con espacios seguros, con un trato de calidez donde la empatía sea la carta de presentación de los servidores públicos.
Sisa Remache, del Comité Internacional para el Desarrollo de los Pueblos, indicó que el Warmi Imbabura es una necesidad de todos para trabajar en los temas de protección, prevención y respuesta ante los casos de violencia.
“Es una alternativa para responder ante la violencia, el aporte para cambiar la realidad debe venir no solo desde los gobiernos locales, también desde todos los actores como instituciones educativas, autoridades del barrio, juntas parroquiales, en sí todos estamos llamados a apoyar en esta corresponsabilidad social”, dijo.
Warmi Imbabura
Paolina Vercoutére Quinche, viceprefecta de Imbabura, informó que el Warmi Imbabura es un centro de atención y protección de derechos donde se brindará atención integran y psicosocial a los y las usuarias, se contará con profesionales capacitados como abogados y psicólogos que acompañen y remitan los casos de violencia.
“Hemos detectado que muchas compañeras no pueden denunciar casos de violencia por la falta de recursos económicos, la lejanía de su entorno y sobre todo por el desconocimiento de sus derechos, por lo tanto Warmi Imbabura va a ser una respuesta a esas necesidades de estar acompañadas para poder acceder a la justicia, un abogado u abogada que le pueda asesorar en
español o kichwa, que tenga la empatía para conocer lo que realmente le está pasando y acceder a la justicia”, dijo la autoridad provincial.
El primer Warmi Imbabura emblema entrará en funcionamiento en el transcurso de los 100 primeros días de gestión, se ubicará en Ibarra, en el Patronato Provincial que se convertirá en Imbabura Inclusiva, un centro de desarrollo social para la ciudadanía.
Además, en función de las denuncias de violencia, de acuerdo con la línea base, un segundo espacio del Warmi Imbabura funcionará en Otavalo. Se contará con la Escuela Móvil de Derechos que recorrerá los seis cantones y 36 juntas parroquiales de la provincia, en especial en las comunidades alejadas donde mayormente callan los casos de violencia.
Warmi Imbabura nishka rurayta hatarichinkapakmi; Kitikunamanta, ayllullaktakunamanta 80 warmikuna tantanahurka. Chaypika hatun yuyaykunatak kunahurka, wasi ukupi warmikuna llakichiy tukushkakunata makipurashpa yanapanamantami rimarirka.