El asambleísta oficialista por Imbabura, Fernando Jaramillo, enfrentó en las últimas horas una doble polémica: un lapsus verbal durante el pleno de la Asamblea Nacional y la falta de votos para destituir a Solanda Goyes, vocal del Consejo de la Judicatura.
El incidente lingüístico ocurrió mientras Jaramillo intervenía para expresar sus condolencias por el fallecimiento del congresista colombiano Miguel Uribe Turbay. En su discurso, reemplazó de manera involuntaria la palabra “roto” por “rompido”, lo que dio paso a una oleada de críticas, burlas y memes en redes sociales.
Este miércoles 13 de agosto de 2025, el legislador difundió un comunicado en el que aseguró que circulan imágenes generadas con inteligencia artificial y un video manipulado para tergiversar sus palabras. “Lo hacen porque les incomoda que fiscalice y cumpla con mi deber de defender la ley y la transparencia”, señaló. También afirmó que seguirá “fiscalizando con la misma fuerza… defendiendo la justicia, exigiendo transparencia y haciendo respetar la ley”.
El lapsus coincidió con un revés político para Jaramillo. La moción que impulsó para enjuiciar políticamente y destituir a Goyes no alcanzó los 101 votos requeridos. El resultado final fue de 75 votos a favor, 64 abstenciones y 5 en contra, lo que llevó a que el proceso sea archivado tras más de siete horas de debate.
Jaramillo acusaba a Goyes de incumplimiento de funciones, argumentando que abandonó una sesión clave del Consejo de la Judicatura en abril, impidiendo según él la aprobación de un reglamento para jueces constitucionales.
Pese a la derrota legislativa y la controversia mediática, el asambleísta insiste en que se trata de un intento de desacreditar su labor. “Mientras tenga voz, la usaré para decir la verdad”, concluyó en su pronunciamiento.
