
Los familiares de los cuatro menores desaparecidos el pasado 8 de diciembre de 2024 en el sur de Guayaquil acudieron este martes al laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses, ubicado en el norte de la ciudad, para verificar si los restos humanos encontrados en Taura, cantón Naranjal, corresponden a sus hijos.
El hallazgo de los restos ocurrió el 24 de diciembre de 2024, durante un operativo de búsqueda en un manglar de difícil acceso, ubicado a kilómetro y medio de la carretera principal en Taura.

Inicialmente se informó sobre tres cuerpos, pero Billy Navarrete, representante de la Comisión Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, confirmó que son cuatro. Debido al estado de los cuerpos, fue imposible realizar una identificación inmediata, por lo que se recurrirá a un análisis antropológico, cuyos resultados estarán disponibles el lunes 30 de diciembre. Si esta prueba no resulta concluyente, se realizarán exámenes de ADN, que podrían tardar hasta 30 días.

El lunes se reveló un video que muestra a dos de los adolescentes siendo embarcados en el balde de una camioneta por personal militar en la avenida 25 de Julio.
En respuesta, la Fiscalía solicitó la formulación de cargos por desaparición forzada contra 16 militares presuntamente implicados. Además, una jueza otorgó un habeas corpus a favor de los familiares y declaró la existencia de desaparición forzada.
El Ministerio de Defensa confirmó que los 16 uniformados de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) están bajo custodia militar, con vigilancia intensificada para prevenir cualquier riesgo de fuga.
Mientras tanto, los familiares, respaldados por instancias legales, exigen celeridad en el proceso de identificación y justicia para los menores desaparecidos.
