
En Imbabura, la ejecución de obras de infraestructura vial por parte de la Prefectura Ciudadana reflejó los resultados de una gestión eficiente, liderada por el prefecto Richard Calderón. La construcción y el mejoramiento de la vialidad fueron planteados como estrategias clave para fomentar el progreso, dinamizar la economía, integrar cantones y ciudades, y, fundamentalmente, mejorar la calidad de vida de la población.
Durante 2024, se concretaron proyectos largamente esperados, mediante una inversión de 13,2 millones de dólares. Estas obras, que incluyeron asfaltados, adoquinados y empedrados en los seis cantones de la provincia, transformaron la movilidad, incrementaron la productividad, facilitaron el acceso a servicios públicos y generaron impactos positivos en el empleo y la economía provincial.
En Ibarra, se destacaron los asfaltados de las vías El Arcángel – Yuracrucito y Rumipamba – Chiriguasi, junto con el adoquinado de varios sectores parroquiales, que sumaron 18,53 kilómetros intervenidos. La inversión, que ascendió a 10,3 millones de dólares, se enfocó en crear ciudades más inclusivas y accesibles.

En Pimampiro, se mejoraron 18,59 kilómetros de vialidad, entre los que sobresalieron los asfaltados de las rutas Pimampiro – Mariano Acosta y Pimampiro – Los Árboles – El Inca, además de la vía alterna Mataquí – Sigsipamba y el adoquinado en sectores como Guanupamba y La Florida. Para estas intervenciones se destinaron 6 millones de dólares, logrando revertir años de abandono.
Otavalo registró 17,68 kilómetros mejorados con una inversión de 7,2 millones de dólares. Entre las obras destacan los adoquinados de caminos que conectan comunidades rurales clave, como Gonzáles Suárez – Pijal, Otavalo – Quichinche y otros sectores estratégicos.
Antonio Ante experimentó mejoras en 16,79 kilómetros de vías, gracias a una inversión de 6,3 millones de dólares. El adoquinado de la vía San Antonio – Peguche fue una de las obras más representativas.

En Urcuquí, se intervinieron 19,29 kilómetros de vialidad en comunidades rurales como Cahuasquí, Pablo Arenas, Buenos Aires y San Blas, con un presupuesto de 3,6 millones de dólares, promoviendo la conectividad y el progreso en zonas históricamente rezagadas.
Cotacachi, por su parte, fue beneficiado con el mejoramiento de 14,78 kilómetros de vías, mediante una inversión de 10,7 millones de dólares. Las intervenciones incluyeron la rehabilitación de la capa asfáltica Quiroga – Cuicocha y múltiples adoquinados en comunidades rurales.
El prefecto Richard Calderón resaltó que estas obras representan un cambio significativo en la vida diaria de miles de familias, al eliminar barreras de acceso y fomentar el desarrollo económico y social. Además, destacó que para 2025, se proyecta un plan aún más ambicioso con estudios avanzados para proyectos estratégicos, como la Circunvalación del Lago San Pablo, el Anillo Vial de Antonio Ante y la conexión Sigsiloma – Guaraczapas.